jueves, 9 de mayo de 2013

Un año.

 Hace casi un año, no tuve que sentirme tan lejos y creer que podía mirar atrás como si nada. Se me vino encima, no hace un año aún no estoy tan lejos.

Me aterré, eso me pasó me frené en seco, me sentí sola, me sentí atada a algo que me tiraba para abajo. Solamente me quería destruir, terminar con la mierda que estaba haciendo de mi vida. Terminar de ser un objeto que no valoro, terminar con todo, tenía miedo, no era nadie realmente solo me movía con el viento. Me asusté tanto que corrí, me alejé de todo, no sabía que pasaba no sabía quién era. Me escondí y lejos de los espejos que reflejaban miradas que no podía ver intente de a poco volver...

Acá estoy casi un año después avance y retrocedí muchas veces, pero se acerca ese lugar en el tiempo en el cual se acaban mis avances, en el cual no hay nadie, ni nada. En el que parece que todos mis pasos son en falso y que nada me sostendrá.

Me cuesta mucho darme cuenta de lo poco sola que estoy en realidad, de los que me rodean y comparten conmigo su tiempo. De las personas que me hacen sonreir y que me dan más de lo que reciben y parece no importarles.
 Me cuesta mucho darme cuenta de que no existe un fin y que mis pasos siempre van a estar en el suelo si eso es lo que quiero. No importa cuanto me cueste pero voy a avazar y a alejarme de eso que odio.

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